Quién más, quién menos ha oído hablar de los seguros de vida. Una póliza enfocada a ayudar a familia, allegados o beneficiarios en caso de fallecimiento, invalidez o enfermedad grave a través de una indemnización, a este tipo de seguro de vida se le llama seguro de vida riesgo.
Pero en el mundo de los seguros de vida existe otra opción, los llamados seguros de vida ahorro. Una opción que, a pesar de, su creciente inmersión en España ( alrededor de 10 millones de españoles cuentan ya con uno) sigue siendo una gran desconocida.
Está más enfocado a la vida que a la muerte, donde beneficiario y asegurado suelen ser la misma persona.
Hoy te contamos más sobres este tipo de pólizas.
¿Qué es?
El seguro de vida con ahorro es un producto financiero que tiene como objetivo garantizar la sostenibilidad y asegurar el futuro de quien lo contrate, poder tener esa jubilación soñada o poder seguir manteniendo el estilo de vida.
A través del pago de una prima (periódica o fija) el asegurado obtiene una rentabilidad futura, consiguiendo así una renta complementaria a la pensión. De hecho, es una alternativa a los planes de pensiones que se ofrecen.
Un seguro de vida ahorro es una alternativa que ha ido ganando peso, entendiéndose como algo más moderno que el clásico seguro de vida riesgo, además de que en cualquier caso también puedes incluir beneficiarios en caso de fallecimiento.
Ventajas
Las razones por las que estos seguros de ahorro está cada vez más al alza son bastantes:
Las aportaciones que hagas se pueden modificar o pausar. Si tus condiciones de vida cambian puedes variar la prima que estás pagando (a mayor o a menor) a pausarla si tu economía no pasa por el mejor momento.
Suponen un añadido al clásico seguro de vida, con estos cubres el fallecimiento, pero también suponen un ahorro o inversión.
El capital aportado puede ser recuperado en cualquier momento. Si necesitas sacar dinero del seguro lo puedes sacar cuando quieras, de forma parcial o total. Esta póliza te ofrece un capital líquido continuo, una garantía de capital que irá subiendo con los años.
Posibilidad de elegir el método de pago de las primas. Dependiendo de lo que quieras asegurar, de como quieras pagarlo o de tus condiciones económicas, puedes elegir entre aportaciones periódicas (mensuales, trimestrales o semestrales) o la aportación de una prima única, en la que el asegurado aporta todo el capital cuando contrata el seguro.
Es un seguro de bajo riesgo. Su condición de producto de largo plazo hace que su contratación no suponga un riesgo para la vida del asegurado.
La devolución del capital está asegurada mediante el Consorcio de Compensación de Seguros. No existe riesgo de pérdida, ya que la ley ampara lo que se llama derecho de rescate.
También cubre el fallecimiento. Aunque la póliza esté enfocada a la vida, el fallecimiento o invalidez entran dentro de sus coberturas. Si el asegurado fallece, el establecido como beneficiario será el encargado de cobrar la póliza, o los herederos legales en caso de que no se haya designado uno.
Posibilidad de elegir forma de cobro. Ya sea con un único pago, donde todo el dinero ahorrado le sería abonado de una vez, o con pagos periódicos, donde se le iría abonando de forma periódica. Una buena opción para vivir sin sobresaltos.
Existen muchas modalidades de seguros de vida ahorro, por lo que es posible encontrar uno que se adecue a tu perfil, economía e interés.
Tipos de seguros de ahorro
Dentro de esta variedad de seguros de vida también hay subdivisiones, que perfilan aún más cada producto.
Planes de Previsión Asegurados (PPA)
Los PPA son una variedad pensada para complementar la pensión pública y mejorar la calidad de vida en la jubilación. Es un producto muy similar a los planes de pensiones, pero con el añadido de que puedes añadir coberturas de fallecimiento o invalidez.
La fecha de cobro se suele establecer en el inicio del periodo de jubilación del asegurado, con un PPA te asegurarás del cobro del capital invertido y de una rentabilidad establecida en la póliza.
Seguros Individuales de Ahorro a Largo Plazo (SIALP)
El SIALP o Plan de Ahorro 5, como también se le conoce, tiene la intención de crear un ahorro a largo plazo, para lo que proporciona importantes ventajas fiscales.
Los asegurados saben a ciencia cierta el tipo de interés durante todo el periodo del pago de las primas. El límite de aportación está establecido en 5.000 € anuales y permite siempre (aunque son pólizas pensadas para un mínimo de 5 años) la posibilidad de tomar parte del capital invertido. Es un seguro pensado para la seguridad y rentabilidad a medio-largo plazo.
Planes Individuales de Ahorro Sistemático (PIAS)
De origen reciente, estos planes se crearon para en la jubilación disponer de una renta vitalicia. Son un producto de ahorro a largo plazo, y también con rentabilidad asegurada y una fiscalidad muy provechosa.
Las aportaciones son periódicas y el cobro se prevé a partir de los 10 años de pagos.
Seguros Unit Linked
Un seguro que está creciendo mucho en los últimos años es el llamado “unit linked”, el más arriesgado de los productos que hemos comentado, es una póliza asociada al seguro de vida pero no funciona como el resto.
En los Unit Linked el capital aportado por el asegurado se invierte directamente en fondos de inversión elegidos por el propio cliente, entre las opciones que te presenta la aseguradora.
Estos seguros te pueden dar una mayor rentabilidad aunque el riesgo será mayor.
Seguro de Renta Vitalicia
Como su nombre indica tiene como objetivo el cobro de una renta de por vida desde una edad determinada. Como otros, el foco lo tiene puesto en dar una jubilación tranquila y con un cobro fijo para el asegurado. Dependiendo de 2 factores, prima aportada y el interés pactado, en esta modalidad el pago es único y el interés estará en torno el 1 y 3%.
También cuenta con grandes rebajas fiscales que van a más dependiendo de la edad con la que lo contrates.