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Aunque mucha gente no lo sabe, además de para pagar con ellas, las tarjetas de crédito o débito tienen otras ventajas. Ofrecen descuentos en productos y servicios, ofertas exclusivas, protección ante accidentes en viajes, protección contra robo y también, seguro de vida, entre otros.
No es algo que todas las tarjetas ofrezcan entre sus prestaciones, y tampoco todas incluyen el mismo servicio. Pero si lees las condiciones de tu tarjeta de crédito probablemente encuentres un apartado donde habla de seguro de vida.
Sí, en eso se basa el seguro de vida asociado a las tarjetas, en ofrecer una cobertura por el fallecimiento o la invalidez del titular de la tarjeta.
La cobertura por fallecimiento está más extendida que la de invalidez, mientras que una está incluida en las prestaciones de casi cualquier tarjeta, la otra es más residual.
Lo que las tarjetas de crédito incluyen como seguro de vida es la posibilidad de que la aseguradora se haga cargo del crédito pendiente si fallece el titular de la tarjeta.
Así, en caso de muerte, libera a sus herederos (cónyuge, hijos…) de tener que hacerse cargo de la deuda pendiente con la entidad bancaria.
Lo habitual es que este servicio vaya incluido al contratar la tarjeta, sin tener que añadirlo de forma adicional. Esto implica que no hay que pagarlo aparte, aunque en ciertos casos sí que se estará pagando, muchas tarjetas incluyen este coste en los gastos de mantenimiento o conceptos similares.
No esperes un seguro de vida tradicional si adquieres una de estas tarjetas, no se va a pagar un capital a los beneficiarios que designes ni se va a cubrir la asistencia jurídica o legal, ni el testamento. Este seguro sólo tiene un objetivo y es pagar el saldo que haya quedado pendiente en la tarjeta, en ese sentido se parece más a un seguro de vida hipotecario. Tampoco hay que elegir ni beneficiarios ni capital, porque lo que se garantiza es la deuda pendiente de la tarjeta.
En cuanto a la invalidez, es posible encontrar esta cobertura tanto en el seguro de vida como en el seguro de protección de compras.
Si lo tienes cubierto, en caso invalidez de accidente o enfermedad que te deje en estado de invalidez permanente y absoluta, no pudiendo desarrollar tu actividad laboral habitual ni ninguna otra, el seguro se encarga de cubrir la deuda pendiente que hubiera en la tarjeta.
El caso de las tarjetas de débito es más complejo, porque al no existir un pago por adelantado, no hay un capital que cubrir. Si no existe deuda pendiente, el mismo seguro de vida que para las tarjetas de crédito no tiene sentido.
Esto no quiere decir que ninguna tarjeta de débito cubra el fallecimiento o la invalidez, solo que es más difícil encontrarlas. Pero en algunas tarjetas “premium” sí que encontrarás este servicio.
Lo más habitual es que las tarjetas de débito incluyan el seguro de protección de pagos y no el seguro de vida.
No, no te pueden obligar a contratar un seguro de vida con tu tarjeta.
El problema es que muchas veces las entidades no dicen de forma clara que estás contratando un seguro, por lo que si no lees bien las condiciones y cláusulas puede que no sepas que lo tienes.
Tanto si quieres el seguro como si no lo quieres, tendrás que estar seguro de si está cubierto, o no, y de cuáles son las situaciones cubiertas. No solo por las ventajas que ofrece, sino, porque afecta a la cuota de la tarjeta, si no lo quieres podrás bajar ese precio.
Para esto, lo primero sería preguntar al agente que te proporciona la tarjeta. Si ya firmaste, habría que leer los términos y condiciones con detalle o contactar con la entidad que te vendió la tarjeta, dentro de ese apartado suelen venir los beneficios adicionales o seguros que incluye la tarjeta. También hay que fijarse en la aseguradora que comercializa el seguro, porque muchas veces el banco solo actúa como intermediario.
Y en caso de haberlo contratado sin querer o sin saber, también tendrás que contactarlos para poder cancelar ese seguro.
Importante recalcar que no todas las tarjetas de crédito o débito tienen seguro de vida, cada una tiene sus propias prestaciones, límites, coberturas y demás. Depende de varios factores, la aseguradora que tiene el seguro, la tarjeta que contrates o el banco que te ofrezca la tarjeta. No es lo mismo una tarjeta de El Corte Inglés que una Visa, ni que una ofrezca CaixaBank o ING.
Las tarjetas suelen incluir varios seguros para proteger el saldo pendiente y las compras con la tarjeta, y también prestaciones adicionales para ofrecer un mejor servicio:
El seguro de vida en una tarjeta de débito o de crédito es un complemento interesante, pero no deja de ser eso, un pequeño extra de tranquilidad en nuestra vida. Nunca podrá reemplazar a un seguro de vida tradicional.
Esperamos que te haya gustado descubrir que las tarjetas de crédito o débito tienen seguro de vida, y saber que cuentas con una protección extra para ti y tu familia en caso de fallecimiento o invalidez. Para cualquier duda sobre esta cobertura o sobre seguros de vida, no dudes en contactar con nuestros asesores especializados.
Tipo de seguro | FALLECIMIENTO |
FALLEC. + INVALIDEZ |
DOBLE CAPITAL |
TRIPLE CAPITAL |
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Precio por año | Desde 20 €/año | Desde 45 €/año | Desde 67 €/año | Desde 90 €/año |
Fallecimiento por cualquier causa | ||||
Invalidez Permanente Absoluta | ||||
Doble capital en caso de fallecimiento por accidente | ||||
Triple capital en caso de accidente de circulación |